Crear un acuerdo familiar para el uso de la tecnología
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Establecer reglas para el uso de Internet y la tecnología en casa
Un acuerdo familiar para el uso de la tecnología es útil para todos porque permite a los padres establecer o reforzar las reglas y pautas que los jóvenes deben seguir cuando usan Internet o aparatos electrónicos. Por ejemplo:
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¿Cuántas horas al día pueden pasar ocupados en la computadora, tableta, o jugando juegos de video?
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¿Está permitido el uso de los medios sociales? ¿Cuáles?
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El uso de la computadora portátil, ¿está permitido a puerta cerrada, o los niños deben usarla en áreas comunes de la casa donde los demás puedan verlos?
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¿Se les permite a los niños que tengan los dispositivos móviles en su dormitorio toda la noche?
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¿Hay sitios de Internet en particular que los niños no tienen permiso para visitar?
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¿Qué información se puede compartir en línea y cuál no?
Este tipo de acuerdo es también una manera de iniciar una conversación sobre la seguridad en Internet y, para evitar malentendidos, es el momento propicio para decidir y comunicar desde el principio las consecuencias a que los niños deberán atenerse si no siguen las reglas. A continuación le ofrecemos algunas sugerencias y preguntas para tener en cuenta al crear el acuerdo para el uso de la tecnología.
¿Cómo describiríamos el uso que nuestra familia hace de la tecnología y los medios sociales?
Esto da a los jóvenes la oportunidad de decirles a sus padres: “Bueno, yo los veo a ustedes usando los aparatos todo el tiempo, ya sea enviando y leyendo mensajes de texto o de email, o leyendo en un dispositivo electrónico". A veces los padres se alarman cuando sus hijos les hacen ver su propio comportamiento porque no se habían dado cuenta de él hasta ese momento. Es importante que los padres sean responsables.
¿Cuáles deberían ser las reglas para el uso de la tecnología y los medios sociales los días de clases y los fines de semana?
Esta pregunta da a la familia la oportunidad de hablar sobre la importancia de limitar el uso de la tecnología a las tareas escolares durante los días de clases. Dependiendo de la familia, la respuesta podría ser que está permitido usar la tecnología como esparcimiento después de terminar todas las tareas. Para otras familias, los fines de semana, feriados y vacaciones son suficiente oportunidad para que los jóvenes se saquen las ganas de usar la tecnología y los medios sociales. Hay familias en que este tipo de uso libre dificulta el regreso a la rutina de la semana de clases. Queda en manos de cada familia decidir lo mejor para ellos teniendo en cuenta sus necesidades y personalidades.
¿Qué sucede cuando algo sale mal, por ejemplo, si alguien desobedece las reglas del acuerdo o hace algo inapropiado relacionado con el uso de la tecnología y los medios sociales?
Es esencial platicar abiertamente sobre estas situaciones para que los jóvenes entiendan que podría haber consecuencias si alguien desobedece las reglas del acuerdo. Lo último que una familia debe hacer cuando algo sale mal es silenciar la conversación.
¿Qué sucede si están de visita en una casa con diferentes reglas?
Ésta es una de las situaciones más difíciles que los padres tienen que manejar; es el eterno problema de no tener control de las cosas a que se expondrán los hijos fuera de su hogar. Una opción es llamar a los padres del amigo de su hijo antes de la visita para comunicarles hasta dónde su familia está cómoda con el uso de la tecnología y los medios sociales. Otra opción es decirle a su hijo que cada familia tiene sus propias reglas, y que cuando uno visita la casa de otra persona debe seguir sus reglas aunque esas reglas no coincidan con las reglas de su propia familia.
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